Ing. Juan Betances
Durante estos días de diciembre, el mundo occidental celebra la Navidad. En medio de algarabía, de “fiestas, lerenes y lechón”, el pueblo se apresta a celebrar con “ponche, vino o licor”, o con “pasteles, cerveza y ron”, la actividad del ano que mas cautiva hasta a los mas ignorantes de lo que se festeja. Pero nos preguntamos: Cual es el motivo de la navidad? Que es lo que se conmemora? Cuál es el origen de la navidad?
Las canciones de este tiempo aluden a los villancicos, los aguinaldos, las serenatas y todo lo que simboliza fiesta. Pero preguntamos si es esta alegría, que se manifiesta en este tiempo, algo pleno, duradero, que perdura y permanece, que responde al deseo profundo del hombre de encontrar gozo, alegría y paz para su vida? o es algo transitorio, fugaz como una estrella, pasajero, efímero y volátil, temporero y limitado?
1. Para recibir a Dios, hay que estar preparados
Los profetas del pueblo de Israel anunciaron la venida del Mesías. Desde Isaías a Malaquías, los hombres hablaron de parte de Dios sobre la venida del Señor. Anunciaron su venida invitando al pueblo a prepararse ante su llegada. A Zacarías, sacerdote judío, mientras ejercía su ministerio sacerdotal, se le apareció un ángel del Señor, que le anuncio del nacimiento de Juan el Bautista; el ángel le dijo: “tendrás gozo y jubilo, y muchos se regocijaran por su nacimiento; pues será grande a los ojos del Señor,… y a muchos de los hijos de Israel los hará volver al Señor su Dios; y el mismo ira delante...a preparar para el Señor un pueblo bien dispuesto”. (Lc. 1:14-17) De él dice el apóstol Juan: “este vino para testimonio, para dar testimonio de la luz, a fin de que todos creyesen por él”. (Jn. 1:7)
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