Por: Margarita García
Comienza un nuevo año y tenemos
que seguir confiando en la fortaleza de Dios mirando al futuro con sueños
renovados no precisamente olvidando el pasado, sino con la esperanza, la
certeza y la seguridad de que es mucho mejor lo que Dios nos tiene preparado para
este comienzo del año 2013.
Preparémonos para comenzar y
seguir el curso del nuevo año, que nos espera con fe, más allá de los
pensamientos que a veces intentan desanimarnos debemos levantarnos y confiar en
que Dios ha tenido el control de nuestras vidas.
Año 2013, tiempo de buscar su
presencia, acercarnos más a Dios, enamorarnos y apasionarnos de su gloria, año
de fe, prudencia, sabiduría, paz, promesas de bendiciones, eso es lo que Dios
ha mandado a decirnos, propugnar porque nos arrepintamos, que busquemos su
rostro, ir a la calle a evangelizar su palabra, un pueblo que vele por su
venida, pura. Limpia y sin mancha, es el tiempo y la hora que debemos mirar a
Dios como nunca antes, reconocer los días en que vivimos, ver que las profecías
se cumplen en cada momento, que la tierra está gimiendo por la proclamación de
los hijos de Dios. Este es el año donde cada creyente debe tomar el espejo y
mirarse a cara descubierta si verdaderamente es un portador de su gloria. De
modo que si alguno está en cristo, nueva criatura es, las cosas viejas pasaron,
he aquí todas son hechas nuevas. Tabernáculo prensa de Dios asume un compromiso
delante de Dios, y es remover profundamente a las iglesias para encontrar gente que esté dispuesta a clamar a
Dios, un remanente en el cuerpo de Cristo que esté diciendo “yo necesito más de
Dios.”
Una lista que comienza con el
amor a nuestro Señor, amor a nuestros semejantes, la unidad del cuerpo de
Cristo en cada una de las iglesias que predican el evangelio, edificar
fortalezas de esperanza y fe, tejer con la palabra de Dios grandes mantos de
sanidad, misericordia y bondad con los cuales cubrir a los necesitados, con los
cuales cobijar a aquellos que se encuentran perdidos y para quienes la palabra
de Dios es locura, afianzar nuestra labor en el Señor y nunca sentirnos
satisfechos con los logros alcanzados ni sentirnos conformes con las almas
rescatadas mediante la comunicación de la palabra sino más bien sentirnos
renovados con cada ladrillo empalmado en nuestras edificaciones de fe,
sentirnos regocijados y llenos de júbilo con cada semilla que sembremos en el
inmenso jardín de amor que el Señor nos ha reglado y permanecer alegres de
saber que estamos acumulando riquezas donde la polilla no puede corromperlas,
justo al lado de la gracia divina de nuestro Señor.
Este año hermanos, brindemos
amor de la manera mas eficaz que podemos hacerlo, recordemos a nuestros
semejantes que en cada lista de metas y objetivos para el año 2013 tenemos que
insertar en primer lugar que debemos afianzar nuestra relación con nuestro
Creador, que es la única meta que nos permitirá alcanzar todas las demás y nos
dará la verdadera satisfacción de cumplir la mejor de las misiones, esto es
compartir la vida eterna con todo el mundo, con toda la humanidad a la cual
Dios amó y ama de tal manera que le ha regalado la salvación y la mejor de las
metas que es la vida eterna.
No hay comentarios:
Publicar un comentario